lunes, 31 de agosto de 2009

VIVIR CONTENTOS

EL CONTENTAMIENTO - I PARTE



Pareciera ser que el tema de “el niño” en nosotros es un tema de interés, ya que uds. me dejaron esa inquietud. Comparto contigo, entonces, un escrito del año 2005 donde se puede apreciar la otra mirada que reside en nuestro interior.

Reflexionaba que cuando somos niños, estamos, en general, bastante más contentos que cuando nos volvemos adultos. Y pensaba que los niños nunca están atrapados en las circunstancias y momentos externos, sino que siempre se sienten libres para volar con su imaginación. Cuando nos sentimos libres, automáticamente aparece la experiencia del contentamiento. La capacidad de la mente de imaginar mundos mejores y maravillosos es la puerta a la libertad espiritual. Es decir, físicamente puedo estar el algún lugar, y mentalmente puedo estar volando muy alto y completamente libre de las limitaciones de lo que me rodea. Los adultos vamos perdiendo esa capacidad de volvernos Superman o La Mujer Maravilla, o el papá o la mamá, o estar piloteando un avión o estar jugando a la casita de las muñecas. Me parece que es tiempo de reconquistar el espacio de nuestra libertad espiritual en los dominios de la imaginación más pura y elevada (capacidad de crear imágenes conectadas a nuestra esencia pura espiritual, capaces de darnos la experiencia de otros mundos espirituales).
Les invito, entonces a viajar por estos mundos de luz e inocencia del alma.

Cuando se habla del Dios de tu corazón y de tu comprensión, también se suele habla de un reino. Se ha dicho: "Mi reino no es de este mundo”. ¿Qué reino es ese? Es el reino del ser, el mundo de mis pensamientos y mis sentimientos. Nadie más piensa por mí, y nadie más siente por mí. Cada uno es responsable por lo que piensa y siente, puesto que cada uno crea lo que crea de acuerdo a su capacidad y entendimiento. Aquí radica nuestra más profunda libertad. Cada uno es por lo tanto, rey o reina de este mundo interior, este reino espiritual, también llamado el reino del alma: Luego, si cada uno es rey o reina ¿qué es lo que un buen gobernante desea para su reino, en este caso, interior? Lo que un buen gobernante desea es Paz y Prosperidad para su reino. Luego, es tarea del rey o la reina enseñar a la mente (el súbdito) a pensar bien y crear sentimientos elevados. Esta es la responsabilidad que un buen rey o una reina no puede delegar a otros: la responsabilidad de gobernarse, y de gobernarse bien. Un rey de buen corazón tiene intenciones puras para la felicidad de todo el reino, esto es, se dejar guiar por sus mas altos y nobles ideales. A esto se le conoce como Realeza de la Pureza. Pureza en sentimiento, palabra y acción, así como en visión, actitud y comportamiento. Pensamientos puros significa llenos de buenos deseos y sentimientos elevados para todos.; palabras puras son las que dan la experiencia del respeto profundo y bendiciones de felicidad a los demás; y acciones puras son las que hago recordándome que lo que hace la diferencia en mi vida y en la vida de los demás, es lo que sea que haga sea hecho con paz, amor y felicidad. Mis pensamientos crean mi visión de mi mismo y del mundo que me rodea, y de acuerdo a esta visión, se generan los sentimientos que crean mi actitud hacia el mundo (qué tengo que hacer), y mis acciones determinan mi comportamiento que es como finalmente expreso mi coherencia en la vida.- “Por sus frutos los conoceréis” se refiere a que sus hechos los conocerán realmente. Muchos hablan bien, y hasta piensan buenas cosas, pero son menos los que viven (y hacen) así como piensan y dicen. Alguien puede pensar que es bueno estar en paz y puede hablar de paz, y permanecer pacífico todo el tiempo.

Hoy desoimos al corazón en nuestra desconexión y, además, ahogamos el niño que existe en nosotros.
Es tiempo de re-accionar.

(Continúa …)